Estuve ausente...me fui tan lejos como llevada por la brisa del mar que hoy esta frente a mis ojos...y el mar que me llevó me trajo nuevamente. Un adiós, un beso frío, una noche negra...un nuevo amanecer es lo que me dejó el susurro de aquel nombre...

martes

Blanco como la luna


Blanco como la luna, tu piel me llama,
corro en silencio buscando refugio de ti
tropiezo con tu mirada en medio de la nada,
Sé que mi  resistencia te gusta más,
te atrae, te embriaga, te motiva,
aumenta tus ganas de tenerme,
pero yo solo quiero huir,
huir de tu mirada de tigre
de tus dientes que anhelan mi carne,
de tus garras afiladas, que casi me rozan,
de tu risa insana que me sofoca;
Blanco como la luna, tu piel me llama
¿Hasta cuándo he de huir?
Hasta que la noche cubra tu piel
y vuelvan las sombras que me ocultan de ti…

Se terminó...

Me pides que lo olvide…
que perdone tus besos fríos,
tu mirada ausente y fugaz,
la dureza de tu voz entrecortada
tus absurdas excusas de cada día.
Me pides con premura,
con impaciencia, con ardor
que arreglemos nuestras cuentas,
como antes lo solíamos hacer,
Tendidos en el piso,
Hasta el amanecer,
pero esta que hoy te habla
que te mira de frente y sin pudor,
sin una lágrima en los ojos,
esta misma hoy te enrostra
que esta historia se acabó.
Tu miel perdió su sabor,
tus palabras perdieron peso,
tus ojos perdieron encanto,
tu olor perdió atractivo,
y de lo poco que antes hubo
hoy no queda nada.
Ahora es mejor que te retires,
que salgas sin hacer ruido,
y no cierres la puerta tras de ti,
déjala abierta como lo está mi alma,
pues cuando suenen las campanas
pasará por este umbral
uno más hombre que tú,
sólo es cuestión de esperar…

lunes

¿Qué nos pasó?

¿Qué nos pasó que un día desperté y no me gusto lo que vi?
que cuando volteé a verte, vi a un total desconocido
que pensé que me amaba, pero sólo me deseaba,
que pensé que se moría por mí, pero sólo vivía de mi
de mis sueños, de mis alegrías, de mi alma.
¿Qué nos pasó que cuando me dijiste “te amo”
sentí  la frialdad chorreando por mi espalda,
y la rabia agolpándose en mi rostro sin risa?
¿Qué nos pasó tras la puerta gastada de la habitación?
¿Cuándo se acabaron las ganas de sentirte cerca?
de pintar en mis labios un “te necesito” un “te amo”
para dar paso, ahora, a una mueca  indiferente…a un adiós…

martes

Como el pan remojado en vino

Te encuentro entre sombras, te veo
me dejas descubrirte … allanarte
pisar tu suelo, penetrando en tu interior.
En tu cámara secreta, entre tus sábanas
me escondo de las miradas sin rostro.
Me acoges, me acaricias como a una niña,
pero al instante, tu instinto renace en ti
y me entierras en tu cuerpo, me escondes,
me devoras como el pan remojado en vino,
con prisa y lentamente, con odio y con amor,
te vas llenando de mi, saciando tus antojos.
El opíparo banquete de una noche sin luna
llega a su fin llegando el amanecer,
mañana, habrá más por degustar …
a la misma hora y en este el mismo lugar…

domingo

Formada entre tus manos

Mírame soy aquella piedra
que forjada entre tus manos,
adquirió forma y realidad.
Tú me encontraste en el camino,
viste en mi lo que otro jamás vio,
me llevaste al taller de tu alma
y en él me forjaste con amor,
con martillo y cincel me dibujaste,
y tus manos me conocieron;
descubriste mis secretos, llegando
hasta donde estaba mi esencia
me descubrí sólo para ti,
y sólo por ti me dejé quebrar,
henchida de amor fui naciendo,
tus manos apretaron mi deseo
escondido entre la dureza de mi piel,
y una vez terminada tu obra,
me enseñaste a amar
nací entre tus manos, entre tu boca
que me enseño a decir: “te amo”
entre tus brazos que me dieron calor,
entre tus piernas que me apretaron,
entre tus sábanas que hicieron arder
este pedazo de piedra hecha mujer,
hecha amiga, hecha amante,
hecha carne entre tu piel…

sábado

La Derrota

Me dejaste sin fuerzas… vencida,
derrotada por tus ansias… plena,
satisfecha de tu amor y tus deseos,
llena de tu esencia, de tus caricias.
Me dejaste sin respiro…agotada,
¡casi se me va la vida bajo tus brazos!
¡casi pierdo la razón y la cordura!
en sólo horas, que parecieron días.
Me grabaste en tus entrañas,
y con mis uñas te escribí mi nombre,
me tapiaste con tu cuerpo,
me amarraste entre tus piernas,
me ahogaste de deseo,
y a borbotones me bebí
todas mis culpas y mis miedos.
En esta batalla de amor pleno,
ganaste tú y perdí yo,
y con la cabeza hundida
avergonzando al qué dirán,
en esta lucha cuerpo a cuerpo
satisfecha te declaro: 
como mi único vencedor…

domingo

"Donde siempre"

Te espero, donde siempre,
donde la noche fue enceguecida,
donde la luna enloqueció de amor,
donde el reproche quedó amordazado.
Te espero, inquieta, deseosa,
en el lugar perfecto, y la hora perfecta,
donde las palabras hallaron muerte,
donde el silencio reinó triunfante,
donde el deseo se pasea desnudo.
Ahogaré mis gritos…mis ansias,
esperaré el momento exacto
para comerme todo tu amor,
bocado a bocado...
Te espero, donde siempre,
ligera de miedos, de reproches,
encaramada sobre tu recuerdo,
envuelta en deseo, en impaciencia,
dispuesta a tus demandas,
a todo lo que quieras…a todo lo que puedas…

viernes

La Trampa

Te volví a creer otra vez…¡mira que tonta fui!,
tonta de mi que volví a correr hacia tus falsas palabras,
que mansamente me até al cuello tu seducción,
que sin pensarlo dos veces me entregué a tu sonrisa;
y tú con el arte del engaño bajo la manga,
con tu astucia me rondaste, me cercaste…y esperaste...
colocaste la trampa y me viste caer en ella,
para luego devorar a tu presa sin ningún remordimiento.
Tonta de mí, que me dejé engañar…que no supe esperar,
que me dejé llevar hacia donde tú querías,
que te abrí las puertas de mi habitación y de mi alma,
y tú villano apetecible, que mentías como nadie,
y que también me amabas como nadie,
que adormeciste mis oídos y me pintaste flores en la cabeza.
Hiciste bien tu trabajo, hasta que te descubrí,
hasta que dejaste el rastro de tu engaño,
y ahora conozco tu juego… ahora te conozco bien.
Cuando entres por esa puerta, no te escucharé,
me dormiré pegada al teléfono, pero no te llamaré,
morderé de a pocos mi almohada, pero no te pensaré…
arañaré mis sábanas, pero no te nombraré...
reprimiré mis ganas de ti, pero no te buscaré…
esta vez no caeré de nuevo... en tu trampa.